domingo, 28 de octubre de 2007

Suspiro Limeño (parte 2)






segundo día: viernes 12 de octubre











debo reconocer que en Chile no tomo cerveza, no me gusta, pero en Brasil la encuentro bastante mejor... debe ser porque es más aguada, menos amarga, y mucho más helada... de todos modos la cerveza me da dolor de cabeza, y la noche anterior había tomado un poco de cerveza con gelo y limón. es que cuando no está helada, le pongo gelo.


así fue que nos despertamos, ya un viernes, después de haber descubierto una noche limeña escondida. y bueno, fui la única que quería tomar desayuno, pero cómo perderme ese delicioso jugo de mamao papaya natural, que me recuerda cuzco, arequipa y también mi querido Brasil....



12 de octubre, día de la raza, cumpleaños de mi abuela Icha que está en los cielos...



Jonathan, el hombre de mi hermana, decidió invitarnos al show de Jorge Drexler, muy bien, es que bueno, ganas sus buenas lucas.... y na po partimos a comprar en la experiencia mística de subirse a una micro. en Perú los taxis son tan baratos que bueno, si andas en grupo, jamás te subes a una micro. pero había que ver y subir, y bueno, lindas, de colores como alguna vez nuestras micros fueron. Y un hombre gritando en la puerta el destino del recorrido, cobrando el pasaje dentro, como micro de puerto...


ya con las entradas en nuestras manos, se nos hizo tarde y teníamos hambre...





destino recomendado : Cevichería "Dos muelles" en San Isidro. debo decir que cada cosa que comíamos era igualmente maravillosa. un pisco sour increíble, y bueno, pedimos tiradito, ceviches con unas salsas, y unos frutos de mar a la parrilla, y juro que al recordarlo, me empieza a dar hambre. afortunadamente mi hermana se compró un libro de cocina con las recetas de esa cevichería, así que tengo la esperanza de volver a deleitarme...




a las 15 horas teníamos hora marcada para visitar un museo privado. Cuando digo privado, es realmente privado, la casa de los Poli, casa donde viven la tienen convertida en museo. al llegar afuera nos sentíamos perdidos, porque nada decía que eso fuera un museo. y bueno, tocamos la campanilla, y en la puerta se abre una ventanita, y tras un rejilla, un hombre preguntando a qué veníamos. Entramos y bueno, por lago me decían que al lado de la casa de Poli, el museo del oro no valía la pena.


una casa llena de piezas barrocas, pinturas limeñas, marcos cuzqueños, arte religioso, muebles. no había ni un centímetro libre de historia, de dorado, de alas, de arcángeles y vírgenes. y Bueno, nuestro guía, hijo del magnáte Poli, decía lo que quería, lo que pensaba sobre cada una de las piezas, de la colonización, de religión. un hombre alto que sabía lo que quería. y yo pensando, aquí nadie puede vivir. Igual sería terrorífico ser niño y vivir en un museo, porque todo es intocable según lo que estamos acostumbrados. pero ahí estaba todo, el sillón de la salita, con una reliquia histórica. al salir al jardín, al final una sala especial que era realmente el "museo", con piezas de arte precolombino. Vasijas fálicas, es impresionante, todo era realmente fálico, no eran esas la vasijas que me mostraban en mi colegio de señoritas al pasar arte precolombino.


qué vasijas zoomórficas decía el heredero de Enrico Poli ( de unos 40 años, un solterón amador de reliquias). Zoomórficas que nada, son espermios, ovarios, úteros y falos...


También había coronas de oro de la tumba del Señor de Sipán, plumas, máscaras...


fue todo impresionante, y lo mejor, es que ellos viven, hacen su día a día en ese museoooo....


Luego de casi dos horas en que recorrimos como 500 años de historia en la casa familiar de don Enrico Poli, necesitamos respirar aire puro. es que al señor le gusta el palo santo, y lo siento, me hostigan los inciensos.



Librerías, y caminar, dos libros de escritores peruanos fueron mi inversión: novela de Alonso Cueto, que aún no leo, y cuentos de Bryce Echenique que hasta el minuto me han gustado....




caminar, caminar


cielos nublados, bruma, cálido frescor


caminamos al óvalo de Miraflores y su central park, que la huasa de mi hermana creyó que realmente así se llamaba, ojo, que el mapa turístico viene en inglés.


caminamos aún más y llegamos al hostal a descansar.

20.30
un taxi nos lleva a la "Rosa náutica", restaurant auspiciado por guale y la seño, es decir, mis padres

el pisco sour mejoró al de la cevichería de san Isidro lo que ya es mucho decir...

un restaurant como en un muelle arriba del mar. qué decir, de los platos, cada uno espectacular. debo decir que la Causa colonial rellena con camarones es algo que quiero volver a experimentar. (cómo un puré con palta me derritió la boca aún no lo comprendo!)



después del postre a Yoni se le ocurre la genial idea de decir q Gonzali cumplía años, y bueno, han llegado los mozos cantando a coro, con un brownie entre las manos


nuestra noche estelar recién comenzaba...


arriba del taxi se supone q mi hermana y yoni irían a dormir, pero yoni, cn un poco de vino en el cuerpo decidió que ya no estaba cansado. Fuimos los 4 al Tizón a ver a nuestro amigo Lucho...










y bueno, qué decir, Perú Libre, fue lo que nos invitaban estos simpáticos peruanos, y aunque el pisco era muy bueno, tenía que recordarles que no me pusieran tanto jugo de limón. Ya más tarde, les llega el viejazo a mi hermana y Yoni, y deciden retirarse. Con Gonzalo nos quedamos...


Debo decir que en Santiago no me pasa lo que en Lima y Sampa sí...

o los hombres que viven al norte del trópico de capricornio son más galanes, piroperos,


o nuestros chilenos son más trancados, tímidos, o poseros (nuestra parada cool definitivamente es distinta)


o soy gusto caribeño

o es el fenómeno de la extranjera la que es ameno coquetearle...


sí, porque en Perú y Brasil no es raro oir, un "gracias por ser tan linda", de hecho salir en esos lugares es como ir a un tratamiento de relajo, spa y autoestima


y bueno, también cosas así como "te haré esta noche inolvidable" (auqnue eso me parece como de teleserie venezolana), que lleguen y de la nada te miren a los ojos para decirte curiosos piropos..


me gusta carretiar cn ellos, te invitan tragos, te llevan a buenos bares, te dicen cosas lindas, por favor, mis queridos amigos nacionales, seamos menos cortados...




así seguimos bailando, terminé íntima amiga de Chio, la lésbica dj, que me hacía perú libre, la piscola con pisco peruano, que le gustaba hacer saber a todos que era lesbiana (es que también son medios jotes y un chico la perseguía), pero a la vez demostrarle su afecto a Jason, el socio de Lucho en el bar... Chio tiene un hijo muy lindo...







bailamos hasta las 2.30, y ahí con Gonzalo y Lucho nos tomamos un taxi a Miraflores, para ir a nuestro hostal. Nos bajamos a unas 8 cuadras del hostal en el parque central, porque Lucho había dejado unos lentes en otra discoteca. de pronto, entramos a un subterráneo, cuya puerta la protegían dos grandotes de negro. Entramos, estuvimos 5 minutos, y fue otro submundo, el submundo reggetonero limeño. de estar en la calle silenciosa, fue como sumergirse en una burbuja por 5 segundos.





Caminamos, acompañados por Lucho, hasta nuestra posada


y nos despedimos

sin saber si a nuestro amigo Lucho lo volveríamos a ver

2 comentarios:

Unknown dijo...

Ylos otros dias cuando!!!!!!
Esta buena la narrativa, quedan mas de dos dias de viaje..........

ma(g)dalena dijo...

mira, no sabía q yoni leía el blog

hehehhehe
los otros dos días vendrán dp, q estoy grabando unos cortos sin nada de tiempoooo