domingo, 23 de marzo de 2008

el aliento de lo local

corría el año 2002 y en la facultad de artes, Pedro celedón nos daba clases a los de teatro y arte. llegó el fin de semestre y comenzó a hablar del arte local. usaba un término: "el aliento de lo local".

esto referido a la creación artística contemporánea, porque en un contexto donde especialmente a nivel anglosajón se da la internacionalidad cultural, obliga a reflexionar sobre el nacionalismo en el arte. El arte se empieza a implicar mirando hacia lo local, buscando sus significaciones en la herencia nacional.

la verdad es que no recuerdo mucho lo que decía, pero nunca olvidé el aliento, es un término que quedó implantado en mi memoria académica. el concepto el símbolo

pensar en el aliento de lo local me trae imágenes y sensaciones

porque no hay nada más íntimo que sentir el aliento sentir el aliento ajeno sentir el aliento ajeno, y que ese aliento no te incomode cuando le hablas a una persona y estás tan cerca que sientes su aliento, y no huyes, es que algo está aconteciendo.

tan cerca, que los espacios íntimos de cada uno comienzan a entrecruzarse compartir la intimidad del aliento

no sólo al hablar
estar cerca
respirar cerca
y aún sin besos
lo sientes.

cuando el aliento local te molesta
por muy atractivo que encuentres racionalmente al dueño de ese aliento
si te incomoda
es que no pasa nada
que nunca te pasará nada

soy muy sensible a los alientos.

de cada hombre que me ha gustado
su aliento ha sido un cuento
porque finalmente creo muy pocos hombres me gustarán realmente
a pesar de besar a unos y otros
no porque los beses, podrás hacer tuyo ese aliento
han habido besos automáticos
distanciados
conscientes de que desagrada ese aliento

definitivamente, no me gusta el aliento a cenicero de los fumadores empedernidos
nunca podré tolerarlo

me acuerdo de estar bailando rock and roll, con un niño arquitecto, en clases de baile que daban en la escuela de teatro, y me acuerdo que odiaba bailar ese ritmo con él por su aliento.
y él bailaba muy bien, y era opción para sacarse buenas notas...
pero su aliento me superaba.
menos podía bailar vals, en donde tenía que mirarlo a los ojos para no marearme.
prefería bailar boleros que no tenía que estar aliento con aliento.

incluso puede pasar
salir meses con un hombre que te vuelve loca...
que te irías hasta la luna con él
pero a pesar de todo eso,
no soportar su aliento
signo quizás, de ser más un capricho que un enamoramiento

si cada paso previo al beso,
pasa por tu cabeza,
concientemente su aliento
distanciándote del momento romántico del coqueteo
si el aliento se evidencia
es que ese no es el camino cierto

el aliento de lo local es compartir lo íntimo tan íntimo
que no te avergüenzas de hablar tan cerca,
que no te invade respirar su aliento, sólo te da nervios,
nervios en la barriga.
nervios sabrosos
coquetos
el aliento se hace tan propio y local
que dejas de percibirlo
o empieza a ser tuyo

compartir el aliento es el coqueteo enfrentado al primer pudor, antes del pudor de los cuerpos
y dar besos no es necesariamente compartir el aliento

compartir el aliento tiene que ver con en un tiempo retenido, pausado, que avanza lento, se respira el aliento ajeno

que se hace propio y reconocible luego de los sucesivos encuentros es un aliento que te revuelve todo, que te hace agua la boca, que de sólo sentirlo te dan ganas de darle besos

varios alientos
después de un rato,
me hostigan
me aburren
me entedian
y me largo

pocos alientos he podido hacerlos míos, reconocibles,
pocos han conseguido derretirme la boca
como si estuviera comiendo un pedazo de chocolate amargo,
alientos que se vuelven vicio y adicción.

no sé cuántos alientos podrán convivir como locales conmigo
sé que serán pocos
sé que hasta hoy
no llegan a completarme los dedos de las manos

pero lo que sí sé
que cuando ocurre
todo se aclara
las energías fluyen de un respirar al otro
se potencian
y eso es signo puro de que debo aventurarme en ese aliento local
...

1 comentario:

Marulista dijo...

Loca

me dejaste super pegá con eso d los alientos. Nunca había pensado el grado d intimidad que viene con ello.

Y cmo un aliento t puede alejar d alguien.

No soy de las personas que hablan muy de cerca, pero lo del aliento me conmueve.

Mucho

Xu